Cine argentino con perspectiva de diversidad y género
en la Casa de la Provincia de Buenos Aires
El próximo miércoles 10 de agosto comienza el ciclo Entrada Zeta, organizado por la Casa de la Provincia de Buenos Aires y el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA), a través de la Coordinación de Diversidad y Géneros. Entrada Zeta cuenta con una programación de ocho destacados largometrajes del cine nacional para compartir y debatir sobre temáticas vinculadas a la perspectiva de diversidad y género. Las funciones serán cada quince días a las 17.30 horas durante los meses de agosto, septiembre, octubre y noviembre en Av. Callao 237, CABA. yCada proyección contará con la presencia de invitadas e invitados especiales para reflexionar con el público luego de finalizada la película.
El 10 de agosto se presentará el documental Cada 30 horas, de Alejandra Perdomo, que aborda la temática de la violencia de género y los femicidios. Después de la proyección, el público podrá conversar con la directora del film y familiares de las víctimas.
El 24 de agosto se exhibirá Corazón de león, de Marcos Carnevale, que aborda la temática de la discapacidad, la discriminación y el modo en que las personas son educadas para juzgar o ser juzgadas
PROGRAMA AGOSTO
MIÉRCOLES 10
CADA 30 HORAS (Argentina, 2016) Dirección: Alejandra Perdomo
En Argentina, cada treinta horas una mujer muere víctima de violencia de género. Algunas de ellas logran pedir ayuda para que su agresor deje de lastimarlas; confiando en que las leyes las amparen y que la justicia condene al violento. Diversas violencias son naturalizadas, por lo cual la mujer agredida tiene que enfrentar una mirada social que la juzga, la cuestiona y la condena LEER MAS
MIÉRCOLES 24
CORAZON DE LEÓN (Argentina / Brasil, 2013) Marcos Carnevale
Ivana Cornejo es una exitosa abogada dedicada a los litigios de familia. Desde hace tres años está divorciada de Diego Bisoni, también abogado y socio del estudio Cornejo/Bisoni. Tras la pérdida de su celular, Ivana recibe la llamada de alguien que lo encontró, con intenciones de devolvérselo. Es León Godoy, un arquitecto de gran renombre con una personalidad arrolladora: simpático, galante, carismático… y también divorciado. En la charla telefónica que mantienen se establece una empatía inquietante y ambos sienten un inmediato interés. Durante esa misma charla coordinan para encontrarse al día siguiente en una confitería y allí concretar la devolución del celular. Ivana es la primera en llegar y León llega unos minutos más tarde. Cuando lo ve queda perpleja, León es todo lo que ella percibió, pero mide 1,35 m. Es el hombre perfecto, pero… demasiado bajo. A partir de ese encuentro, Ivana buscará superar esos 45 cm que le faltan al hombre de su vida. Así se enfrentará a las convicciones de una sociedad implacable y a sus propios prejuicios, que exigen a los hombres el éxito económico, profesional y esos ineludibles 180 centímetros de altura
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